El mago dice que tiene poderes mágicos. Llama a uno de los espectadores para intentar esta experiencia, se le pide que se relaje y que cierre sus ojos. Se le pide que se concentre en un punto en su mente e imagine un dedo que lentamente toca su cara. El espectador mueve ligeramente su cabeza como si alguien hubiese tocado su rostro, pero todos ven como el mago nunca lo ha tocado! Â
Una nueva forma de hacer magia.Â
No hilos ocultos, no imanes o accesorios electrónicos!Â